Lo siento, tengo que desahogarme. Un rato. Estoy hasta las mismas narices de ello, por eso voy a hablar.
Harta me tienen ya los escritores. Porqué resulta que se les ha acabado la imaginación. Esto es lo que pasa al entrar en una buena parte de las librerías (no todas, por suerte):
Vas, en mi caso, a la parte juvenil, y adivina adivinanza, ¿Qué encuentras? Pues una estantería enooorme llena de copias de la copia de grandes libros (y que han acumulado fama). Véase Crepusculo, Diario de Greg, etcetc. Y no es que me parezca mal que alguien se inspire en el mundo de Mayer, por ejemplo, pero no puede ser que encuentres títulos como "Diario de una pringada". ¿Pueden estar bien? puede. De hecho hay muchos que valen la pena. Pero el tema es que de tanto repetir cansan, que quieres que te diga. Y me fastidia por que además, con sus portaditas a tuticolori, encuadernaciones atractivas y demás artimañas para ganar clientes. En realidad, desde mi punto de vista, muchos de esos libros solo se escriben para ganar pasta. Y yo considero que un libro es bueno cuando, si, está hecho para ganar dinero, pero sobretodo escrito por el puro placer de escribir.
En fin, bueno, que encuentras la estantería principal con esas copias ya citadas. Tambien suele haber una estantería con los clásicos, de toda la vida, como El libro de las tierras vírgenes, Tom Sawyer, & Co, que yo, la verdad, no miro demasiado. Otra más con los "Superventas": Harry Potter, series de Laura Gallego, Crepúsculo, Narnia, Los Juegos del Hambre, y otros no tan conocidos, como Las Hijas de las tormentas. Luego tenemos a los libros del tipo de las lecturas obligatorias, realistas..., ejemplos: Campos de Fresas, Noche de Viernes, bueno, y otros (no estoy muy metida en el tema). Y por último, allí apartaditos, con su encuadernación poco sorprendente, se encuentran los que en su mayoría son mis favoritos. Libros de autores cómo César Mallorquí, J. S. Fabra (los que no se han hecho famosos), y otros autores por conocer. Son libros que personalmente me gustan muchísimo, ya lo he dicho, y que creo que deberían tener más y mejor reputación.
Ahora bien, no quiero decir que todos los libros encuadernados perfectos sean obras de arte, ni que todos los encuadernados de forma más pobre sean maravillosos. De hecho, yo también he picado bastante con esas portadas, a veces con buen y a veces con mal resultado.
Ah, y perdón por el pedazo tostón que acabas de leer.