Pensar en tí es como envenenarme con el mejor de los manjares. Es que ha vuelto a pasar. Nos hemos vuelto a reír mientras corríamos por las calles desiertas, sintiendo la adrenalina que nos impedía parar. Pero cuando esta adrenalina paraba, nos mirábamos felices pensando que esto no podía acabar. Cuando volvimos a tu casa, y nos abrazamos de nuevo, tu dijiste una palabra. Solo una. Laura. Al oír mi nombre saliendo de esos conocidos labios, te respondí. Sara. Me sonreiste. Te sonreí. Y tuve la seguridad de que no podía acabar. Pensar en tí es como darme un banquete del peor de los venenos.
uau!
ResponderEliminarprecioso!
sobre todo el principio, me ha encantado la comparación!
pero que.. son lesbianas? o a migas?
besitos
¿Qué lido! Al principio pensé que sería una pareja, pero después me he dado cuenta! Y es muy precioso :)
ResponderEliminarUn beso!
Felicidades por el relato, Clara!!
ResponderEliminarYo también lo encuentro muy lindo!
Joana
Me ha gustado muchísimo, realmente es precioso, enhorabuena!
ResponderEliminargracias a todas!!!!!
ResponderEliminar(son amigas!!!):P